Introducción
Tenemos que cambiar la percepción que tenemos del envejecimiento, aceptando la realidad tal cual es. Nos guste o no, cambiamos con el tiempo, en algunos aspectos para mejorar, en otros al contrario.
Físicamente, con la edad nos hacemos más lentos y vamos perdiendo agilidad; nuestra libido se debilita y se nos hacen arrugas. Pero al mismo tiempo, la edad nos aporta enormes oportunidades de crecimiento intelectual, emocional y espiritual.
Claro está que envejecer puede a veces acarrear inconvenientes, como problemas de salud, que nos afectan de manera inesperada y no deseada. Pero también es verdad que la edad nos trae ciertos beneficios. Hay cosas que somos capaces de ver y saber apreciar y comprender, de manera distinta a los sesenta o a los ochenta años que cuando tenemos veinte o treinta.
Envejecer sanamente es aceptar positivamente los auténticos desafíos que nos trae la edad, junto con las buenas oportunidades que se van presentando.
Responde estas preguntas:
- ¿En qué cosas he madurado y mejorado con el tiempo?
- ¿Espero seguir haciéndolo?
Ejercicio nº 30
Aprender de los mayores
Entabla alguna conversación con personas mayores o que tengan más experiencia que tú en algún área. Pregúntales sobre sus experiencias en la vida – sus errores y aciertos- y lo que aprendieron de ello. Escucha con interés lo que tengan que decirte. Luego, escribe sus reflexiones sobre lo que aprendiste de esas personas.
Lo que se propone es que seamos receptivos ante la sabiduría que solo se desarrolla con la experiencia. No solo aprenderemos mucho sobre nosotros mismos, sino que valoraremos mejor la maduración que se alcanza con la edad.
Envejecer saludablemente
Cada año, los países desarrollados gastamos millones de euros o dólares en cosméticos, productos, programas de ejercicios, dietas y cirugías para tratar de retrasar el proceso de envejecimiento.
Sin embargo, no importa todo el dinero, tiempo y energía que se invierta en este intento, es imposible detener este proceso natural del cuerpo.
Por lo tanto, mentalicemos a las personas adultas y aquellas que se acercan a la tercera edad, que acepten esta realidad de la vida, y pongan en práctica elementos básicos que los ayuden a “envejecer con salud y éxito”.
El estilo de vida de cada persona es el principal factor que determina cómo ese individuo va a envejecer. Ese estilo de vida debe seguir tres principios fundamentales:
1. Continuar creciendo sin importar qué tan viejos somos.
Debemos ponernos desafíos físicos y mentales. Debemos seguir activos, moviéndonos y estirando nuestros músculos. También debemos seguir aprendiendo nuevas cosas.
2. No ignorar nuestros riesgos.
Si creemos que tenemos altas probabilidades de sufrir una enfermedad, debemos hablar con nuestro doctor y cambiar nuestro estilo de vida, para así reducir los riesgos que pueden amenazar nuestra calidad de vida como individuos independientes y saludables.
3. Tener un significado y propósito en la vida.
Hay que socializar y participar con otros y no aislarse. Tener un círculo de amigos y ser parte activa de la comunidad. Esto previene síntomas como la pérdida de la memoria y la demencia, incluyendo el alzhéimer.
Lista de agradecimientos
Continuamos con el ejercicio nº 1. Escribe las razones por las que estas agradecida.
Día 1: Estoy agradecido por…